Las revoluciones del giroscopio mantienen su eje apuntando en una dirección. Mientras más rápido es su girar, con más fuerza apunta. El giroscopio es una metáfora de la reflexión. Dar vueltas a un tema nos da rumbo sólido. Cuando tenga una columna, se llamará así: giroscopio

¿Cuánto más tendrán que esperar? #GuarderiaABC

sábado, 7 de agosto de 2010

La Vía Expuesta

(( Si tienes claves de acceso a diarios de Grupo Reforma, por favor lee este artículo en http://www.mural.com/editoriales/nacional/549/1097510/default.shtm Muchas gracias. ))

Tuve la fortuna de vivir cinco años en Roma, Italia, mientras estudiaba un doctorado. Cuando llegué allá, me tuve que habituar a un modo distinto de transportarme. Aquí, como cualquier profesionista, me movía en coche. La universidad donde estudié en Roma se encuentra en pleno centro histórico. Para llegar a ella en auto debía, además de tener uno, pagar un impuesto especial muy elevado por hacerlo circular dentro esa zona. Se paga otro impuesto más por estacionar el coche en el centro histórico.

Durante cinco años casi no me moví en coche. Para llegar a la Universidad tomaba un tren y luego me daba un tour a pie de 20 minutos por la Ciudad Eterna. En total caminaba 40 minutos diariamente. Mucha de la gente que opta por comprar el coche no paga los impuestos para meterlo al Centro, lo deja fuera, cerca de la estación del Metro o de la parada del autobús y aborda el transporte público. Muchos, sobre todo los más jóvenes, se transportan en "motorino" (motoneta).

Compare esta forma de moverse con la de los habitantes de Estados Unidos. Quienes viajan con frecuencia a ese país saben bien que es vital rentar un coche nada más llegar. Hay quien incluso, si va ha hacer un viaje largo, en vez de rentar, compra un coche usado. En las ciudades de EU no tener auto es una forma de discapacidad.

Si, por ejemplo, se vive en el área de Los Ángeles, no es nada raro que la casa se tenga en el condado Anaheim, la escuela de los hijos esté en el Centro de la ciudad y las compras se hagan los fines de semana en los outlets de Orange. Un padre o madre de familia que en un día lleva y recoge a sus hijos del colegio, va al trabajo, luego lleva niños a clases de baile o de karate y hace una compra, supera con facilidad los 100 km en el recorrido. Los estadounidenses dedican parte de su día de vida al freeway. Este es el modelo de ciudad que está detrás de la Vía Exprés.

¿Por qué las ciudades de EU se han extendido tanto horizontalmente? Un estudio (www.planetizen.com/node/43413) demuestra que la causa son los mismos freeways. Cada vez que se dota a un núcleo urbano de una obra de infraestructura del estilo de la Vía Express se desperdiga por los suburbios el 18 por ciento de la población que estaba en el Centro. Van en busca de una casa más grande, con jardín. El costo son las horas perdidas en los traslados, la contaminación, el tráfico, la falta de convivencia con familia y amigos.

Por donde se le vea, la solución racional a la movilidad urbana de Guadalajara pasa por mejorar radicalmente el transporte público y la movilidad no motorizada. Si se tienen recursos públicos limitados, como es el caso, la solución son los autobuses de carril exclusivo, es decir una tupida red de macrobuses.

Onésimo Flores, estudiante de doctorado en Planificación Urbana en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) lo muestra en su blog (www.ciudadposible.com/2010/06/¿tren-o-camion.html). En Bangkok, la inversión necesaria para construir 7 kilómetros de metro subterráneo, alcanzaban para construir 14 de metro elevado, 40 de tren ligero y 426 de autobuses con carril exclusivo, o macrobuses.

Lo que costaría la Vía Exprés sobra para poner la red de macrobuses que reduciría los tiempos de traslado de todos los que decidan subirse y que abatiría drásticamente la contaminación porque el lujo de ir en coche se pagaría con valioso tiempo. Además, obligaría a nuestros obesos conciudadanos a caminar un poco más cada día. Claro que esto implica al Gobierno un choque frontal con las mafias que controlan las actuales rutas de camiones. Si se piensa en la gente, en la inmensa mayoría, esa guerra vale la pena.

La Vía Exprés va por otro lado. Da relumbrón a bajo costo político -el Gobierno sólo se echaría encima a los activistas híper informados que se oponen a ella-, pero representa una mejoría a la movilidad urbana con fecha de caducidad pronta y a beneficio de la gente que ya vive bien olvidando a quienes necesitan urgentemente mejorar su calidad de vida. Al final acaba acentuando otros problemas, como la contaminación y el crecimiento de la ciudad. En el mejor de los casos es un modo poco efectivo de invertir en movilidad urbana, en el peor es un desperdicio de los recursos públicos.

En EU ya vienen de regreso. La ciudad de Nueva York no ha construido grandes obras destinadas a los coches en más de una década. En cambio ha construido 1,400 km de ciclovías y planea que para el 2030 esa cantidad se duplique (http://www.nyc.gov/html/dot/html/bicyclists/bikenetwork.shtml link tomado del blog de Genaro Lozano en El Universal).


Carlos López Zaragoza es doctor en Filosofía y académico.